Entrevista al Dr Ferrer de la Unidad de Prevención de Suicios de Ourense.
-¿Cómo está incidiendo la crisis en los suicidios?
-Con los datos en la mano, no se puede decir que
hayan aumentado, si bien es cierto que no existe un sistema eficiente
para monitorizar el problema. Los datos del INE llegan con dos años de
retraso y, los últimos, no apuntan por ahí. En Grecia sí. Allí se han
duplicado.
-¿Y en el trabajo en la unidad, tampoco lo notan?
-En la consulta sí. Tratamos cada vez más gente
cuyo principal problema es económico. Esos problemas se convierten en un
estigma social. Un desahucio por ejemplo supone un fracaso absoluto.
Hay que tomar medidas porque si no se ponen en marcha políticas que
arbitren soluciones intermedias, que protejan a los individuos, veremos
cómo la tasa de suicidio aumentará.
-¿Deben hablar los medios del suicidio o es mejor silenciarlo?
-Debe hablarse del suicidio, aunque con un
enfoque correcto. En Grecia, algunos suicidios muy mediatizados
contribuyeron a generar un cierto efecto contagio que hay que evitar.
Existen una serie de normas generales que recomienda la OMS y creo que
es un error no hablar de ello. Hay formas de prevenirlo, de detectarlo
precozmente y aplicar un tratamiento al paciente. Cuando el problema se
encaró de forma correcta, las víctimas en carretera empezaron a
decrecer. Hoy mueren en España más personas por suicidio que por el
tráfico, así que creo que se debería llevar adelante alguna campaña de
prevención para paliar este problema. A la hora de informar sobre un
suicidio es importante reseñar que hay alternativas, que la víctima no
pidió ayuda, que no acudió al médico...
-¿Cómo se detecta a alguien en riesgo de suicidio?
-El suicidio es una conducta, no una enfermedad.
Actualmente se estudian algunos marcadores genéticos, pero influyen
muchos factores. La persona en riesgo puede identificarse porque se
enfrenta a un dolor insufrible; se encuentra en un entorno de soledad,
lo que le hace pensar que nadie le ayudará y cree que eso que le está
ocurriendo no tiene solución y que es intolerable. Estos son los tres
factores fundamentales.